Descripción:
Utilización en estado líquido para el correcto tratamiento del agua, así como ajustamiento del pH siempre y cuando este sea inferior a 7’2.
Modo de empleo:
Puede ser dosificado mediante equipos automáticos de regulación y control de pH. Manualmente, se debe diluir previamente en agua la dosis de uso y repartir por toda la piscina. Ello, se efectuará poco a poco y con agitación, haciendo lectura del valor de pH tras cuatro horas de funcionamiento por parte del equipo depurador.
Aunque, las dosis son de carácter orientativo y dependen en gran medida de las características químicas del agua a tratar, es recomendable añadir 1’2 litros de MINORADOR DE pH LÍQUIDO por cada 100 m3 de agua para disminuir 0’2 unidades de pH. El valor del mismo en el agua, deberá estar situado entre 7’2 y 7’6, de modo que su control, se tendrá que realizar diariamente.
Precauciones:
Se trata de un producto corrosivo, por lo que su manipulación requiere el uso de indumentaria y guantes adecuados, así como protección para los ojos y la cara. Un desequilibrio del pH, puede producir molestias en la piel y en los ojos, al igual que un menor rendimiento de los productos desinfectantes. Es por tanto indispensable, ajustar el pH para un óptimo tratamiento del agua, adicionándose a última hora de la tarde en ausencia de bañistas.